Ayer, miles de personas marcharon en la Costa Chica de Chiapas en contra de las concesiones mineras y de presas hidroeléctricas.

El objetivo principal de la protesta que se desarrolló en municipio de Pijijiapan fue exigir a Aristeo Trinidad Nolasco, alcalde de este lugar, que les garantice por escrito que las empresas trasnacionales o mexicanas no destruirán las tierras que han cuidado y preservado durante décadas y que representan el futuro de sus familias.

Los manifestantes exigieron al alcalde no expedir ningún tipo de permiso o concesión a favor de las transnacionales y que se respete su derecho a la propiedad, se garantice su integridad física y salud, así como también el respeto a su medio ambiente.

Los integrantes de la Unión de Campesinos y Pescadores de la Sierra y Costa de Chiapas, Consejo Autónomo Regional de la Zona Costa y Frente Cívico Tonalteco se declararon en resistencia civil hasta que el Estado respete la libre autodeterminación de los pueblos de la región de la Costa de Chiapas y su autonomía. Además llamaron a las organizaciones de la sociedad civil a luchar juntos en defensa de la tierra y el territorio, y en contra de los proyectos de muerte.

Señalaron que, a partir de la modificación al artículo 27 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, se ha permitido que las empresas trasnacionales entren sin permiso a sus territorios para explotar los bienes naturales, lo que ha provocado una serie de afectaciones a la flora y fauna.