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3 de octubre de 21015. “Continuamos viviendo en un estado de sitio convocado por los propios ciudadanos, o nos encontramos en una guerra civil no declarada como tal. De enero de 2008 a la fecha, sólo en Ciudad Juárez se calcula haber cobrado más de 10 mil personas y en el país alrededor de 70 mil vidas a manos de bandas del crimen organizado, policía federal, estatal o municipal, Ejército, escuadrones de la muerte pagados por empresarios y gobiernos o delincuentes comunes que han hecho del dicho ‘a río revuelto ganancia de pescadores’ su modus operandi”, dijo  la doctora Socorro Tabuenca Córdoba, académica de la Universidad de Texas en la conferencia “Espejos de violencia en Ciudad Juárez: feminicidio, narcotráfico, el Estado y la ciudadanía” efectuada en la Universidad Iberoamericana Ciudad de México

 La también investigadora del Colegio de la Frontera Norte dio a conocer que desde el año 2008 a la fecha, sólo en Juárez se calcula que 10 mil personas han fallecido debido a la violencia; y predomina la desaparición de mujeres jóvenes de clase baja.

Autora del libro Mujeres en la frontera, una perspectiva de género; y coautora con Ricardo Aguilar de “Lo que el viento a Juárez,  testimonio de una ciudad que se obstina”,  Tabuenca indicó que como investigadora se ha dedicado a documentar el paralelismo entre violencia, feminicidio y narcotráfico, a partir de que surge en 1993 en Ciudad Juárez y cómo se destapa la violencia entre 2008 y 2010.

“El gobierno nunca ha estado interesado en leer lo que está pasando en la sociedad porque si estuviera interesado, se había terminado por un lado con los feminicidios en Ciudad Juárez y en el resto del país; y por otro lado se hubiera combatido la violencia del narcotráfico desde hace mucho”, se vive en un estado de impunidad en todo el país, denunció.

Comentó que a partir del año 2003, tanto la sociedad civil como el gobierno de aquel entonces debieron advertir que la situación se saldría de control porque el narcotraficante Amado Carrillo tomó la plaza de Ciudad Juárez. Sin embargo, agregó, las autoridades anteriores y actuales están más interesadas en otras cuestiones que en averiguar y presentar resultados contra el crimen organizado.

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Denunció que desde la perspectiva gubernamental se han encargado de estigmatizar a las víctimas, es decir, en el caso de las mujeres asesinadas siempre se decía que fueron prostitutas, bailarinas exóticas o trabajadoras de maquiladoras, “la gente como que no valía, la gente como que se lo buscó”. De la misma manera que en el caso de los jóvenes asesinados, siempre “eran pandilleros, andaban en el narco, entonces se dice: bueno de alguna manera como que no vale la pena protestar por esta gente que al fin y al cabo está en una situación de riesgo”.

De acuerdo con sus investigaciones, en los últimos 22 años los asesinatos sistemáticos de mujeres precedidos de sus respectivas desapariciones, torturas y mutilaciones, para mediados de 2015, en Ciudad Juárez, suman más de 240 y los casos de feminicidio íntimo o sistemático, en la actualidad la estadística señala aproximadamente dos mil.