Poesía en Vendaval

José Vendaval. Mexicano de nacimiento, cuyo oficio, comprometido social y políticamente, lo lleva a transitar entre la ciudad y el campo, entre organizaciones no gubernamentales (ONG) y organizaciones de base, lo mismo lo encontramos en el norte del país que en el sur, en una oficina o en una casa comunal.

José Vendaval es un pseudónimo que encubre a la persona detrás del sentir de alguien, que puede ser cualquiera que, ante la sórdida realidad de México, sublima el dolor, en este caso con la poesía.

Compartimos algunos de sus poemas de dolor, luto y también de esperanza y amor, porque acaso el sentir puede ser colectivo como la acción transformadora.

Voces del pasado (Torreón, mayo 22 de 2011)
Trueno de una noche eterna,
Ecos pretéritos y lapidarios,
No oigo ya su grito al futuro,
¿es que nos han dejado solos?
Madrugada del día que ya no fue,
¿En qué piedra reposas?
¿Qué tonada abre la ventana?
Susurro hecho leyenda:
¿En dónde está el presente?
¿Por qué ha huido el futuro?
¿vamos sordos y ciegos al cadalso?
O todos han callado ante la inminencia
Mis dedos pasean en la noche.
No hay estrellas, ni luna nueva;
Apenas, el trasiego de cabezas,
Escarlata el horizonte
Los Muertos que alumbran el camino,
Lloran al filo de su silencio,
Y quizá sea el murmullo sórdido
Quien calla las voces del pasado
Silencio… Hay una madre que pregunta.
Coagule la sangre su vía al río
Aguarde el verdugo su degüello
¡Acaso pare ya su cuenta el carnicero!

Duermevela (Febrero 2010-2011)
En este universo infinito y sombrío,
En donde la oscuridad cobija la vida,
Una vela ha ceñido su luz y doblado su pabilo.
Súbitas sombras husmean un rastro luminoso,
Breve estela del navío en la mar.
¿Cómo nombrarte ahora, si el pasado se reúsa a llevarte?
¿Cómo asumir un futuro, que sigue preguntando por Vos?
Condenado al presente, sigo buscando tu estrella,
Ahora fugaz a manera de una calle, un bar, una mujer…
… una canción, un trago… el sobresalto de un sueño.
¿Abdicar y creer -en un Dios- y vernos luego?
No me pidan tanto: me atengo a ti y, con tu memoria,
ahora serán mis ojos, voz y manos quienes indagarán el horizonte.
Tu vela se apagó, pero sé que hay muertos que alumbran el camino.
Ya estarás en el Mictlán. Truska: guía a mi hermano, quizás esté sorprendido.
Una vela se ha apagado y, desde entonces,
La luz de tu recuerdo ha prendido más.
Luces para las sombras…
Risas para los llantos…
Flores para tus cenizas.

Sinrazón (Febrero 2009)
En donde está el último número
se encuentra la primera razón de quererte.
En las pausas del huevo y su gallina,
reposa la respuesta al enigma.
Allá, si llegas, está el niño que te ve
sentado al filo del horizonte.
Tiene una respuesta para ti:
que no hay razón, ni lógica para entender,
sino un par de cuerpos
para hablar, amar y disfrutar
del proceso por el cual
una estrella se vuelve polvo enamorado.
En donde esté el vacío absoluto
jugará el universo, que adivino para dos.
En las causas crucificadas,
hay una luz para esta gran oscuridad.
Allá, hay una cercanía,
sin nombre, sin número.
en ella vive la causa de la razón
que es la razón de mi causa:
una semilla esperó dos mil para ver su sol
y yo que debo, que bebo,
por la luna de tu sonrisa,
en la eternidad de Febrero El Breve.
En donde no te esperaba,
juega traviesa esta locura,
la suerte del condenado,
que ahora se sabe a salvo.

Un día de primavera (16 de abril de 2011)
Qué sol el que alumbra esta mañana
Qué luna la que ayer preludió este día
Qué ganas de estar a tu lado hoy,
Para saludar y festejar tu sonrisa
Que las frutas de primavera perfumen tu entorno
Que las flores de mayo adelanten su paso
Que la calenda de junio derrita este corazón
Para bien venirte de mieles, abrazos y alegrías.
Que tus labios se vuelvan profecía de amor
Que tu voz sea agua viva y madre selva
Que tu risa no se canse, canto de niña
Para que nuestras voces sean como carne y hueso
Que los días de esta primavera muevan nuestras mentes
Que sus noches, muevan nuestros cuerpos.
Que sus madrugadas nos sorprendan abrazados,
Para ver las gotas del rocío de cada amanecer, a tu lado, vida mía

Publicado el 01 de Julio de 2011

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